Soy la tercera generación de vendedores de prensa en la emblemática Plaza de Castilla, un lugar que ha sido testigo de innumerables historias y momentos a lo largo de los años. Mi abuelo, un apasionado del mundo de la prensa, fundó este negocio en 1962, estableciendo un legado que ha perdurado a lo largo del tiempo. Su dedicación y amor por la lectura sentaron las bases de lo que hoy somos.

Años más tarde, mi padre tomó el relevo, continuando con la tradición familiar y adaptando el quiosco a los cambios que la sociedad ha ido experimentando. Desde 2015, tengo el honor de llevar adelante este negocio que no solo es un quiosco, sino un punto de encuentro para los vecinos y un símbolo de la comunidad.

Quiero enfatizar la etiqueta «desde 1962», ya que representa no solo nuestra experiencia, sino también el compromiso con la tradición del barrio y el comercio de proximidad. En un mundo donde lo efímero parece dominar, nosotros nos enorgullecemos de nuestras raíces y de la confianza que hemos construido con nuestros clientes a lo largo de las décadas.

Los años que llevamos en este oficio nos diferencian del resto de quioscos de la zona. Cada periódico, revista y libro que ofrecemos lleva consigo una historia, y cada cliente que se acerca a nuestro quiosco se convierte en parte de esa historia. Estamos aquí para servir a nuestra comunidad, ofreciendo no solo productos, sino también un espacio donde la gente puede conectarse, compartir y disfrutar de la cultura escrita.

Así que, si buscas un lugar donde la tradición se encuentra con la modernidad, donde cada compra es un acto de confianza y cercanía, te invitamos a visitarnos en la Plaza de Castilla. ¡Estamos aquí para ti, como lo hemos estado desde 1962!